Varsky y Grabia desmintieron la versión sobre la presencia de barras que instaló Bullrich

La versión de Patricia Bullrich sobre la participación de barras bravas en la marcha de los jubilados empieza a derrumbarse. Juan Pablo Varky y Gustavo Grabia, son periodistas con experiencia en el rubro deportivo desmintieron que en la protesta hubiera presencia de barras.
El gobierno nacional se encargó de imponer su relato sobre la presencia de barras en la marcha de los jubilados. La mayoría de los medios se subió a la versión de que la protesta fue copada por los violentos que controlan las tribunas del fútbol argentino.
El argumento no se sostuvo demasiado tiempo: dos periodistas con un perfil alejado del peronismo y, sobre todo, del kirchnerismo cuestionaron las conclusiones del gobierno. En el gobierno porteño tampoco pudieron verificar la conclusión de la ministra de Seguridad. Dijeron a LPO que había personas con antecedentes policiales, pero no pertenecientes al tablón.
Grabia es el periodista que más investigó los negocios de los barras en clubes y asegura que no pudo reconocer a ninguna primera o segunda línea de las populares argentinas.
La policía de Bullrich le disparó en la cabeza a un fotógrafo, que está herido de gravedad
“Fuentes oficiales de Seguridad decían que tenían identificados barras de All Boys, de Comunicaciones, de Chacarita, de Ferro. Yo hice lo que hago habitualmente, hablé con mis fuentes en las barras. Algunos de ellos incluso me mandaron fotos que demostraban que no estaban en el lugar de los hechos”, dijo Grabia en Radio Con Vos.
“Vi las imágenes de la marcha y solo reconocí a dos barras que tampoco estaban en una actitud violenta. Y no es gente que participe hoy de la conducción de las barras. Javi Mendoza participaba de la barra hasta hace 12 años y hoy tiene más relación con la política que con la tribuna. El Chonle manejó la tribuna de Ferro hasta el ’99, que siempre participó en política. Está en edad de ir a pedir un aumento de la jubilación. Son gente que poco tiene que ver con el poder de la barra en los últimos 15 o 20 años.
El gobierno había buscado desalentar la marcha amenazando con aplicar el derecho de admisión para aquellos que fueran identificados cortando la calle. Pero la advertencia no funcionó.
“Los barras no se muestran en esos lugares porque pueden ser detenidos. El barra, el que maneja el negocio siempre prefieren el perfil bajo. Cuando la vanidad los traiciona, terminan detenidos o en los medios. A veces hay segundas o terceras líneas, pero a veces también son hinchas que no esconden su pertenencia política y van porque están en contra del gobierno. Quizás aprovecharon esa agresión al hincha de Chacarita y se autoconvocaron y participaron de la marcha”, dijo Varsky en La Nación+.