Lucas Ghi impuso a su hermano en la lista pero Sabbatella ya afichó Morón para anunciar su regreso
Lucas Ghi logró imponer a último momento a su hermano, José María Ghi, al tope de la lista de concejales de Morón, pese a la resistencia de Martín Sabbatella. La puja por esa boleta fue la más traumática del cierre que se realizó el último fin de semana y, por momentos, alimentó especulaciones sobre un efecto dominó que amenazó la posibilidad de alcanzar la unidad.
El saldo de las negociaciones dejó tres concejales al jefe municipal entre los primeros seis, dos a Nuevo Encuentro y uno al Frente Renovador.
Además del hermano del intendente, la boleta llevará los nombres de Vanina Moro, funcionaria del gabinete local, Mariano Spina y Beatriz Botti Sibila, identificados con el sabbatellismo, Alfonso Martínez, secretario adjunto de los gastronómicos en Morón, y María Sol Steinberg Rodríguez.
A cambio de esa concesión, Sabbatella logró colar a Mónica Macha como candidata a senadora provincial por la primera sección electoral. Quedó en el cuarto puesto, detrás de Gabriel Katopodis, Malena Galmarini y Mario Ishii, pero los armadores estiman que con una cosecha promedio de votos tendría la banca asegurada.
El momento en que el peronismo estuvo partido: las listas completas que presentó el axelismo
La disputa entre Ghi y Sabbatella tenía condimentos especiales porque el intendente abandonó Nuevo Encuentro el año pasado, cuando decidió pasarse a las filas de los que apoyaban decididamente la proyección de Axel Kicillof.
Desde el partido le facturaban, en consecuencia, que no le correspondían a Ghi las mismas facultades que al resto de los caciques territoriales del conurbano, que acreditaban más peso para definir las listas. “Lucas es el intendente pero nosotros tenemos la potencia y la estructura, él se fue y no se pudo llevar casi nada”, dijo un dirigente cercano a Sabbatella.

Martín Sabbatella.
La bronca de los ex compañeros de agrupación de Ghi se incrementó cuando vieron que postulaba a su hermano. Alegaban que el acuerdo era que se pondría él a la cabeza y se cargaría “la campaña al hombro”.
En el entorno del intendente, dijeron a LPO que “la unidad era un activo a construir y eso se logró”. “Los intendentes teníamos esa responsabilidad de abrir las puertas y construir una lista con la diversidad que nos atraviesa en el territorio, por más que algunos venían con alguna pretensión mayor en la incidencia en la lista”, afirmaron.
Lo curioso es que desde ambos sectores atribuyeron al otro la amenaza de la ruptura y se adjudicaron a sí mismos la generosidad de buscar el acuerdo final.
Como sea, la lista presentada quedó muy lejos de las declamaciones de unidad. El partido de Morón está casi completamante afichado con propaganda de Sabbatella bajo la consigna “Vuelve Martín”, una temprana apuesta a 2027. “Sin PASO, sin internas y sin colectora, ninguna mesa resuelve las diferencias de esta lista”, confesó un sabbatellista.